Cartel indicando noventa minutos de cola para entrar al pabellón.
Si hay algo que caracteriza a Japón y a lo que no acabo de acostumbrarme son los mogollones de gente. Mogollones en el metro, mogollones en la estación, mogollones cuando vas a a ver una exposición, mogollones en los fuegos artificiales, en las fiestas, etc.... El lunes al ir a visitar el castillo de Himeji nos encontramos con una exposición de dulces que se celebra una vez cada cuatro años en esa ciudad. En este enlace teneis la página oficial en japonés.
Realmente sólo entramos a uno de los pabellones en que la gente se movia rápido en la cola y no había que esperar mucho. En el resto nos encontramos con colas de hasta 120 minutos.
En el pabellón además de dulces también se exponía algunos objetos antiguos como moldes europeos para hacer pasteles e incluso ¡para hacer hostias! que yo no había visto en mi vida. Todo esto lo podeis ver en las fotos. También había una trufa gigante de chocolate de tres metros y 800 kilos ...ñam ñam, quien la pillara.
1 comentario:
Eso explica que los japoneses sean bajitos: ¡tienen las piernas desgastadas de tanto estar de pie haciendo cola! ¿O ya han inventado el hacer colas sentados en telesillas?
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